The Stone of Scone (Lia Fáil)

La Piedra de Scone (The Stone of Scone) (Lia Fáil) ha sido durante cuatro siglos testigo de la coronación de los reyes de Escocia.

Es un bloque de piedra arenisca de 152 kgr. en cuya superficie está cincelada una cruz y en cada extremo tiene un anillo de hierro para hacer que el transporte sea más fácil.

Según la tradición, el gobernante se asentaba sobre piedra como rito de fertilidad aunque la leyenda dice que la piedra fue utilizada por el profeta Jacob como almohada.

Desde Kenneth I de Escocia (847) hasta John Balliol (1296), los gobernantes de Escocia se han coronado sobre la Piedra.

En 1296 Eduardo I de Inglaterra saqueó la Abadía de Scone y se apropió de la Piedra. La llevó a la Abadía de Westminster colocándola debajo de una silla de madera de estilo gótico conocida como Silla del rey Eduardo.

Desde la coronación de Eduardo II de Inglaterra, en 1308, casi todos los monarcas ingleses se han coronado en la Silla. Las excepciones fueron Eduardo V y Eduardo VIII que no fueron coronados, la reina María I que fue coronada en una silla que le dio el Papa y María II que fue coronada como monarca junto con su marido Guillermo III en una réplica.

En 1950 cuatro estudiantes escoceses robaron la Piedra de la Abadía de Westminster. El Gobierno Británico organizó una extensiva búsqueda. La opinión pública escocesa no se mostró tan favorable al robo como sus autores esperaban por lo que La Piedra fue abandonada en la Abadía de Arbroath partida en dos pues al sacarla de la Silla de coronación se les cayó.
Película del 2008 "Stone of destiny"
En 1953 para la coronación de la reina Isabel II de Inglaterra, la Piedra se encontraba ya reparada, en la Silla y en la Abadía de Westminster.

En 1996 el Gobierno Británico devolvió la Piedra a Escocia con la condición de que volviera a Londres cada vez que hubiera una coronación.

Hoy en día se encuentra en el Castillo de Edimburgo junto con las joyas de la Corona escocesa.